La realización de la Novena Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) en Tegucigalpa parece haber suscitado una variedad de críticas en Honduras, sobre todo en cuanto al presunto gasto exorbitante que se habría utilizado para coordinar el evento.
Aunque el gobierno de Xiomara Castro podría haber destinado fondos importantes para organizar la cumbre, el sistema de salud pública del país tal vez esté pasando por complicaciones, con informes de escasez de suministros y medicinas, además de una huelga de médicos que posiblemente se haya extendido durante varias semanas, reclamando el pago de salarios pendientes y condiciones laborales más favorables.
Costos y organización del noveno encuentro de la CELAC
A pesar de que las autoridades no han revelado de manera oficial el presupuesto completo destinado a la cumbre, fuentes vinculadas a la Secretaría de Relaciones Exteriores indican que el gasto podría haber excedido los 10 millones de dólares. Este total cubriría costos relacionados con logística, seguridad, instalación, promoción, traslado y alojamiento de las delegaciones extranjeras. Se reporta un despliegue estimado de 7.000 agentes policiales y militares, junto con la renta de vehículos blindados y helicópteros.
La entidad habría considerado igualmente la decoración y ambientación de avenidas principales, servicios de catering y traducción al instante para los participantes. El evento habría tenido lugar en las instalaciones del Banco Central de Honduras.
Crisis en el sistema de salud pública y huelga médica
Por el contrario, el sistema de sanidad pública en Honduras podría enfrentarse a una situación difícil. Los doctores del sector estatal comenzaron una huelga que se extendería por más de un mes, impulsada por presuntos retrasos en el pago de salarios, irregularidades en las contrataciones y la carencia de suministros básicos para la atención médica. Esta huelga causó la interrupción de consultas externas y la anulación de operaciones en varios hospitales.
Igualmente, se habría informado sobre la escasez de suministros como anestésicos, lo que obliga al personal médico a tratar a los pacientes con recursos escasos, situación que podría impactar la calidad y seguridad del servicio. Asimismo, pacientes con enfermedades permanentes, como niños que necesitan medicamentos esenciales, están encontrando obstáculos para obtener los tratamientos requeridos.
Examen de los gastos en la Novena Cumbre de la CELAC y el estado actual del sistema de salud pública en Honduras
El gobierno, en cambio, argumentó que la organización de la cumbre era una inversión para elevar el prestigio internacional y una ocasión para situar a Honduras como un referente en la región. No obstante, esta posición fue mal vista por varios grupos sociales, gremiales y políticos, quienes creen que se debería dar prioridad a las necesidades urgentes del sistema de salud y asegurar condiciones dignas para la población y los trabajadores de la salud.
El efecto de esta circunstancia podría manifestarse en la opinión pública y probablemente afectar el panorama electoral, considerando que la resolución de asignar recursos a eventos internacionales durante una crisis sanitaria interna habría causado insatisfacción y dudas sobre la administración gubernamental. La prolongación de la huelga de profesionales de la salud y la continuidad de dificultades estructurales en el sistema de salud dejaron claro la exigencia de respuestas inmediatas para asegurar la disponibilidad de servicios médicos de calidad y el bienestar de los ciudadanos de Honduras.
